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El apoyo a la universidad pública se concentró en la plaza

En Villa Mercedes, la movilización en defensa de las universidades públicas se congregó en plaza San Martín, donde el sol de la tarde y el calor de la manifestación fueron el ámbito acogedor para que estudiantes, docentes, nodocentes y vecinos autoconvocados fueran poblando sus espacios portando carteles, pancartas y antorchas con una consigna común: apoyar a las universidades, seriamente amenazadas por las políticas de desfinanciamiento del gobierno nacional.

La concentración, que se hizo en las principales ciudades del país en el marco de un plan de lucha que incluyó un paro de docentes universitarios de 48 horas (jueves 26 y viernes 27 de junio) tuvo dos ejes principales de reclamos: la necesidad de luchar por el financiamiento de las universidades y por salarios dignos de docentes y nodocentes.

En el primer caso, la acción fundamental que se emprendió a nivel nacional consiste en una campaña de firmas para adherir a la Ley de Financiamiento Universitario que, tras el veto presidencial del año pasado, volvió a presentarse a fines de mayo pasado y espera ser tratada en sesión especial el próximo 2 de julio. Para aportar adherentes a esta iniciativa, en la concentración de ayer en plaza San Martín se instaló una mesa con planillas donde los manifestantes pudieron firmar su adhesión al proyecto de ley.

Uno de los primeros grupos de estudiantes que llegó a la plaza fue el de chicas y chicos del Centro de Estudiantes de la FCEJS (UNSL). Su presidenta, Emma Carabias Vigil, contó a Radio de la UNSL en Villa Mercedes que la universidad pública argentina “ha sido siempre bandera en el mundo” donde los estudiantes “podemos aún soñar con un futuro profesional”. Por eso llamó a los y las jóvenes a pensar “sin banderías políticas a defender a las universidades públicas y gratuitas que hoy se ven amenazadas por el desfinanciamiento”.

 

“La falta de presupuesto, el desfinanciamiento y la situación en general nos afecta a todos, a los docentes, nodocentes y a nosotros, los estudiantes, porque tenemos que pagar alquiler, la comida, las fotocopias, cursar, rendir…, a todos se nos hace más que difícil”, añadió.

Una estudiante de Trabajo Social de la FCEJS se sumó a la campaña de firmas para adherir al Proyecto de Ley de Financiamiento Universitario “porque estamos en un momento muy crítico en el país y uno de los sectores más golpeados es la educación”, respondió a Radio de la UNSL. “Me parece que el mínimo aporte que puedo hacer es firmar esta ley, y hoy más que nunca hay que estar defendiendo la educación pública porque es nuestro espacio donde nos estamos formando”, añadió.

 

Walter Roldán (SITUNVIME), uno de los oradores, destacó los respaldos que la lucha por la Ley de Financiamiento consiguió a nivel local y provincial, e instó a una mayor participación. Viviana Mercado (ADU) también abogó por lograr mayor concientización a través de la profundización de la lucha, ya que se trata de problemáticas que “nos afectan a todos”, con el agravante de la persistencia de una “política de crueldad”.

Desde SIDIU, sus representantes advirtieron sobre la situación de los investigadores del INTA, del CONICET y del INTI debido a las reglamentaciones “que atentan contra el recambio para los reemplazos”, como también “por la falta de presupuesto”. Están “apostando al ahogo” de la investigación y la ciencia. “Lo que queda es terrible”.

Norma Perinelli, representante territorial del barrio ATE, comentó: “tenemos la oportunidad para juntarnos, de sumar y volver a intervenir; debemos convocar a los jóvenes, centros de estudiantes y alumnos, porque son las generaciones que vienen… Los adultos tenemos que preguntarnos: qué hicimos para dejarles una sociedad mejor”.

Pablo Patiño (ATE) se refirió a las consecuencias de las políticas de ajuste del gobierno nacional por las pérdidas de miles de puestos de trabajo, la generación de pobreza y desigualdad. Sostuvo que la lucha debe ser unificada: “No es únicamente universitaria o docente, sino que es general porque se ha avanzado en contra de nuestros derechos conquistados… Y entender que es una resistencia a largo plazo”.

 

El encendido de algunas antorchas, la exhibición de los carteles que identificaban a las agrupaciones, más la necesidad de juntar las voluntades para algo más que una “gran foto” de unidad: el compromiso de lograr mayor participación y persistir en la lucha, selló la nueva jornada en Villa Mercedes en defensa de la universidad pública, gratuita, inclusiva y de calidad.